En mi práctica como consultor de relaciones y experto en poliamor, rutinariamente encuentro personas que se aman mucho y tienen necesidades de relación drásticamente diferentes. La mayoría de las veces es el hombre de la pareja quien quiere tener una relación poliamorosa y la mujer desea seguir siendo monógama y algunas veces es la mujer la que quiere ser poliamorosa y el hombre es devotamente monógamo. En cualquier caso, puede ser extremadamente doloroso para ambas partes. Hay algunas cosas a considerar si se encuentra en esta posición.

¿Alguna excusa para irse?

Para algunas personas, tratar de abrir una relación es el último intento de evitar que se rompa. Algunas personas en mi estudio de 15 años sobre familias poliamorosas, explicaron como el convertirse en poliamorosos salvó su matrimonio del divorcio, aunque son minoría. Desafortunadamente, volverse poliamoroso para evitar el divorcio funciona muy en pocas ocasiones y con mucha más frecuencia la relación se autodestruye de manera más dramática de lo que podría haber sido. Debido a que el poliamor es tan intenso emocionalmente y requiere de una comunicación concentrada y compasiva, puede ser difícil incluso para personas en relaciones estables que no están experimentando un conflicto significativo. Para aquellos en relaciones de alto conflicto, volverse poliamoroso para salvar una relación funciona tan bien como tener un bebé para salvar un matrimonio - abismalmente.

Si no está satisfecho con su relación y considera el poliamor como una estrategia de "Un pie fuera de la puerta", reconsidere,  es poco probable que su relación original sobreviva a los rigores de la comunicación honesta y los sentimientos complejos, sino que probablemente lastimará a las otras personas con las que salga en su experimento poliamoroso. Si usted está consciente que las cosas realmente terminaron, entonces rompa con su relación anterior por completo y tómese un momento para recuperar el aliento antes de sumergirse en una relación poliamorosa. Le ahorrará dolor a todos los involucrados .

Comuníquese primero, sin trampas.

Debido a que el poliamor se basa en la confianza mutua, el respeto, la honestidad y la comunicación, es importante implementar esas estrategias de relación de inmediato. Al escuchar "Cariño, empecé a ver a alguien más y quiero abrir nuestra relación" puede desequilibrar incluso a la persona más segura de sí misma. La transición a una relación abierta desde una relación monógama es difícil en el mejor de los casos, e intentar comenzar con trampas lo hace aún más complicado. La comunicación es primero, el sexo después.

Satisfacer las necesidades de la pareja existente.

Si alguien siente que ya no está recibiendo suficiente atención, sexo, amor o cuidado de su pareja, la idea de compartir ese suministro ya inadecuado no será buena. Con el fin de hacer que el poliamor sea aceptable para su renuente pareja, primero asegúrese de no solo satisfacer sus necesidades ahora, sino también asegúrele que sus necesidades se seguirán cumpliendo en el futuro.

Parte de satisfacer las necesidades de su pareja, es no avergonzarla, intimidarla o acosarla. La persona de tendencia monógama debe evitar avergonzar a la persona de tendencia poliamorosa por no estar contenta con la monogamia, tal vez ni siquiera sea una opción para ellos. Si la persona poliamorosa lo es por orientación sexual, no es objetivo esperar que se emocione con la monogamia, es como esperar que una lesbiana se entusiasme por estar casada con un hombre. Por el contrario, la monogamia también puede ser una orientación sexual y las personas inclinadas a ella no deben ser avergonzadas o acosadas para el poliamor contra sus deseos. El hostigamiento lleva a un falso consentimiento y muy poco después, al colapso de la relación.

Empezar poco a poco.

Si una pareja solo quiere un poco de apertura y podría estar satisfecho con algo menos amenazante que enamorarse de otra persona, considere comenzar poco a poco. La práctica swinger puede proporcionar a la persona que quiere practicar la no monogamia consensuada, acceso a la variedad sexual mientras mantiene a su pareja como el foco principal para ayudarla a sentirse segura paso a paso. Asistir a un club  swinger por una noche, puede ayudar a las parejas a comunicarse sobre sus sentimientos y deseos sin que nadie más piense que esta será una relación continua. Las personas pueden establecer sus propios límites en este tipo de clubes: Está bien ir a mirar o coquetear con otros sin tener relaciones sexuales con ellos.

Si considerar el sexo con extraños es demasiado, pruebe un evento social vestido para la ocasión o también puede estar en contacto con gente en un grupo poliamoroso. Las personas se mezclan completamente vestidas en grupos poliamorosos que a menudo se llevan a cabo en restaurantes u otros lugares públicos, algunas veces las personas están allí para cumplir con posibles citas, a veces solo para conversar y compartir consejos o experiencias. Una vez más, está bien establecer sus propios límites, por lo que simplemente ir a una reunión no significa que se haya registrado para ser poliamoroso.

Lidiando con el Dolor Emocional.

Si bien a veces no es un problema, en otras ocasiones el deseo de establecer una relación abierta o la transición de la monogamia al poliamor, puede traer dolor e incomodidad para los los involucrados. Aquellos que buscan la no monogamia consensuada pueden sentir vergüenza, culpa y dudas cuando se enfrentan a un ser querido que sufre como resultado de su deseo de apertura romántica o sexual. El compañero monógamo puede sentirse incómodo, no amado o enojado porque su pareja quiere cambiar las reglas de la relación a mitad del camino. Independientemente de la posición que ocupen las personas, existe una amplia oportunidad para experimentar dolor emocional. Elaborar estrategias para enfrentar y abordar el dolor, así como buscar apoyo emocional y controlar la ansiedad, son habilidades de las que todos pueden salir beneficiados.

Invierta en si mismo.

Si usted es la persona que quiere ser monógama y se siente molesto por el deseo de su pareja de investigar otras relaciones, puede ser muy difícil relajarse y dejarse llevar emocionalmente. Si ese compañero es su único apoyo emocional, considere la posibilidad de expandirse para ampliar su círculo social, esto no tiene que significar establecer relaciones románticas adicionales. De hecho, la amistad puede ser justo lo que usted necesita. Sentir que su mundo gira en torno a alguien que quiere pasar tiempo con otras personas, a menudo es aterrador y puede dejarlo sin vínculos. Para tener una base más firme en su propia experiencia, recuerde que es lo que a usted le hace sentir bien: Tener otros pasatiempos, aprender algo nuevo, revitalizar viejas amistades y crear nuevas vínculos.

Estar dispuesto a esforzarse.

El poliamor puede ser un desafío, incluso cuando los involucrados están emocionados por tener una relación consensualmente no monógama. Para aquellos que no están seguros de que sea para ellos, puede ser difícil, sin embargo, puede valer la pena esforzarse mucho por salvar una relación amorosa. Si realmente se aman y confían en que cada uno tiene el mejor interés, entonces den todo lo que tengan para intentar que la relación funcione. Sean flexibles, prueben cosas nuevas y toleren la incomodidad para superar el fastidio de una relación nueva y más satisfactoria. ¡No se den por vencidos!

Estar dispuestos a reconocer cuando no está funcionando.

Si realmente lo intentaron y queda claro que la relación no va a funcionar, entonces admítanlo lo antes posible, arrastrarlo solo empeorará las cosas, creando un entorno plagado de posibilidades de causar dolor  y daño emocional. En lugar de llevar arrastrando a su pareja  hasta encontrar una nueva pareja, termine con ella primero, de esa manera no lastimará más de lo necesario. Es mucho mejor enfrentar el temor potencial de estar solo, que ocasionar dolor a la pareja nueva y a la ya existente.

Muchas veces, un monógamo y un poliamoroso simplemente no pueden encontrar un estilo para relacionarse de manera romántica o sexual que se adapte a ambos de manera correcta y en esos casos es mucho mejor comunicarse honesta y compasivamente a medida que se reconfiguran a otra forma de relación, probablemente platónica. Cuando estas personas continúan amándose y permanecen juntas socialmente pero no románticamente, han creado lo que yo llamo una relación poliafectiva, de esa manera, pueden mantener las relaciones familiares incluso mientras siguen diferentes caminos románticos. Lo importante para una relación poliaffectiva agradable es tratarse bien durante y después de la separación romántica, sin mentir, engañar o fastidiar.